Comprometidas, con la
tierra, que habitamos

 

NUESTROS ORIGENES


Con el nombre BÀRBARA FORÉS, el matrimonio Carmen Ferrer y Manuel Sanmartín hemos querido rendir homenaje a la tatarabuela Bàrbara Forés que nació en Gandesa el día 7 de febrero de 1828.

Bàrbara Forés, hija de un comerciante de vinos (Rafael Forés) y de una propietaria agraria (María Figueras), era una persona de gran carácter e influyó de forma decisiva en su hijo Rafael. Así Rafael Ferrer Forés, farmacéutico y viticultor ilustrado, hizo construir la bodega de la casa solariega donde a finales del SIGLO XIX comenzó a embotellar vino.

Bàrbara Forés significa, por tanto, el respeto y la tradición en la elaboración de vinos, transmitidos de generación en generación durante más de cien años en nuestra casa.

 

NUESTROS ORIGENES

 

 

Con el nombre BÀRBARA FORÉS, el matrimonio Carmen Ferrer y Manuel Sanmartín hemos querido rendir homenaje a la tatarabuela Bàrbara Forés que nació en Gandesa el día 7 de febrero de 1828.

Bàrbara Forés, hija de un comerciante de vinos (Rafael Forés) y de una propietaria agraria (María Figueras), era una persona de gran carácter e influyó de forma decisiva en su hijo Rafael. Así Rafael Ferrer Forés, farmacéutico y viticultor ilustrado, hizo construir la bodega de la casa solariega donde a finales del SIGLO XIX comenzó a embotellar vino.

Bàrbara Forés significa, por tanto, el respeto y la tradición en la elaboración de vinos, transmitidos de generación en generación durante más de cien años en nuestra casa.

 
 

QUIENES SOMOS

 

 

En los años 90 Carmen y Manolo tomamos las riendas de la bodega y apostamos por un cambio de paradigma convirtiéndonos en PIONEROS en la elaboración de vinos en la TERRA ALTA, con la Garnacha Blanca como eje vertebrador y comenzando un cambio en la manera de entender el vino en la zona.

El año 2014 se incorpora a la bodega familiar Pili Sanmartín Ferrer, sexta generación desde Bàrbara Forés. Una NUEVA MIRADA que establece diálogos entre el vino, la cultura, las artes, el paisaje y todo lo relacionado con la cotidianidad.

Con el paso del tiempo hemos aprendido  a valorar las potencialidades del territorio, la dignidad del trabajo en el campo y la importancia del PAISAJE en nuestro quehacer diario. Comprometidas con los ojos cerrados con la tierra que habitamos.

 

QUIENES SOMOS


En los años 90 Carmen y Manolo tomamos las riendas de la bodega y apostamos por un cambio de paradigma convirtiéndonos en PIONEROS en la elaboración de vinos en la TERRA ALTA, con la Garnacha Blanca como eje vertebrador y comenzando un cambio en la manera de entender el vino en la zona.

El año 2014 se incorpora a la bodega familiar Pili Sanmartín Ferrer, sexta generación desde Bàrbara Forés. Una NUEVA MIRADA que establece diálogos entre el vino, la cultura, las artes, el paisaje y todo lo relacionado con la cotidianidad.

Con el paso del tiempo hemos aprendido  a valorar las potencialidades del territorio, la dignidad del trabajo en el campo y la importancia del PAISAJE en nuestro quehacer diario. Comprometidas con los ojos cerrados con la tierra que habitamos.

 

LAS MANOS QUE CUIDAN

 

 

En un proyecto de pequeñas dimensiones como el nuestro, EL EQUIPO HUMANO es fundamental. Gran parte de las labores del campo se realizan manualmente y de forma artesanal, como siempre han hecho los viticultores de este país. Nos acompañan en este trayecto desde hace mucho tiempo

Las manos que cuidan las viñas

ION MIHAI
MARIAN TEPES

El hombre de la tierra 

JOAQUIN HOSTAU BOIX

Las manos que acompañan los vinos 

CÈSAR BERNÚS CASANOVA 

LAS MANOS QUE CUIDAN


En un proyecto de pequeñas dimensiones como el nuestro, EL EQUIPO HUMANO es fundamental. Gran parte de las labores del campo se realizan manualmente y de forma artesanal, como siempre han hecho los viticultores de este país. Nos acompañan en este trayecto desde hace mucho tiempo

Las manos que cuidan las viñas

ION MIHAI
MARIAN TEPES

El hombre de la tierra 

JOAQUIN HOSTAU BOIX

Las manos que acompañan los vinos 

CÈSAR BERNÚS CASANOVA 

 
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